Periodistas y protección de la universidad pública, en análisis
Del error a la barbaridad
El abuso de un avión de uso presidencial para un paseo de familia y amigos con motivo del cumpleaños de la hija del primer mandatario abrió una necesaria discusión pública que Palacio no logró responder aceptando la fuerte equivocación y procurando acciones reparadoras. Pero más grave que esa fallas fue la bochornosa exaltación de la periodista Vicky Dávila de Semana, ante la interpelación del periodista Hassan Nassar, comunicador de la Presidencia, calificando el debate como lleno de hipocresía, dado que la misma periodista y muchos otros que más tarde se solidarizaron con ella, han aceptado invitaciones a vuelos presidenciales con familiares. ¿Cuándo será que estos periodistas, ávidos de escándalo, se miden con la vara que miden a los demás?
Apoyo a las universidades
La decisión del alcalde Daniel Quintero Calle de ordenar el ingreso de la fuerza pública a los campus que se encuentren amenazados por los delincuentes encapuchados que aprovechan la limitada seguridad de las universidades para armar y usar explosivos contra personas y bienes públicos es una decisión necesaria para proteger a las universidades y la protesta pacífica. Los verdaderos enemigos de la universidad y de la protesta pacífica no son las autoridades, como los radicales pretenden mostrarlo, son los delincuentes que se amparan en la pretendida extraterritorialidad de los campus y en el malestar ciudadano para actuar con violencia. Con este paso en la dirección correcta podrían definirse nuevas formas de garantizar a las autoridades universitarias la dedicación a sus actividades académicas y a la sociedad, la plena recuperación de estos espacios públicos para su uso y disfrute.