Medellín es una de las ciudades del país que se distingue por el número, calidad y trabajo de grupo que tienen los centros comerciales. Aquí en esta ciudad comenzó el boom de estos establecimientos, que hoy día por las circunstancias ni están cerrados, ni están abiertos.
♦ MEDELLÍN es líder en centros comerciales. Los hay para todos los gustos, para todos los segmentos sociales, unos más grandes, unos especializados, pero todos forman una gran fuerza en la economía de la ciudad y esto vale porque están en manos de profesionales que han sabido dirigirlos y gerenciarlos con entusiasmo. Las promociones, la recreación, los restaurantes, la moda, el cine, han hecho parte de todo un conglomerado social que día a día los visita.
¿Y ahora qué pintan estos centros comerciales?
¿Cuáles han sido sus mayores dificultades en este tiempo confinamiento?
¿Qué parte de ellos están en servicio?
¿Cómo han recibido el impacto y qué piensan a futuro?
Una muestra de ellos nos responde
- En estos momentos estoy aquí, por ser mi día de pico-cedula, desde que empezaron a circular empleados y a trabajar los que pueden, hemos tomados las medidas preventivas y hemos implementado las normas de seguridad y salud hemos estado aprendiendo y mejorando, con los termómetros, los registros a cada persona que entra, sale y cuánto tiempo demora en el centro, tenemos los tapetes de limpieza y el estar pendiente de las distancias. En Unicentro tenemos más o menos un 10% de locales abiertos como son los bancos, almacenes ancla, farmacias, locales de cambio de moneda, ahora las papelería, almacenes de zapatos y los restaurantes que solo pueden tener servicio a domicilio. Tenemos equipo de emergencia y lo que queremos es darle un parte de seguridad y confianza al que nos visita.
- Las dificultades en Unicentro es el enfrentar colectivamente el tema para el que no estábamos preparados o sea el quedarnos en casa, de aquí que hemos tratado de acompañar a nuestra comunidad para que compren a domicilio.
- El impacto ha sido el económico, dos meses sin producir y hay almacenes que dependen de lo que venden. Seguro que este no será el último episodio que suframos, de aquí que se debe instalar una cultura de cuidado, tenemos que aprender a cuidarnos, los efectos serán fuertes con restricciones. El desafío es cuidarnos a nosotros mismos, el distanciamiento debe ser un hábito, se deben encontrar otras maneras de demostrar afecto.
- Esto nos cogió de sorpresa y lo difícil es que nunca hemos cerrado, hemos operado parcialmente, esto nos ha obligado a ajustar y rebajar costos, por ejemplo nosotros tenemos unas 23 posibilidades de entradas al centro y ahora solo tenemos dos, esto cambia las plantillas de vigilancia, ahora no tenemos ascensores en circulación, no hay escaleras eléctricas pero hay que seguirles haciendo mantenimiento.
- Nuestros locales están abiertos más o menos en un 12%, son servicios de bancos, dos supermercados, farmacias, veterinarios y unos temas de aseo. Ahora entran las librerías, tiendas de celulares y muebles. El impacto es grande porque hemos bajado a un 70 u 80% el tráfico de visitantes, no hay canales para vender, lo digital se mueve pero no alcanza. Estamos “repensando” estrategias. Yo creo que el mundo no cambie, creo que hay que ajustarnos a una nueva realidad de cuidarnos con distanciamiento y que todo el protocolo se cumpla al pie de la letra para que la gente se sienta segura para volver a reactivar la economía. Vamos a tomar la temperatura en 23 sitios de entrada, los baños limitados, dos personas por ascensor, los pasamanos desinfectados, es tener espacios seguros y tranquilos, hay que inventarse cosas nuevas en jugos. El Tesoro ha sido un eje de reunión de familias. Esto es un reto y no hay opción.
- Hay que decir que Sandiego fue el primer centro comercial en Colombia y que este año en el mes de noviembre estará cumpliendo sus 48 años de servicio a la comunidad.
- La dificultad más grande dice don Jaime, es que el comerciante vive de las ventas y en estos momentos no tiene cómo vender. El sistema online es muy bajo todavía. Los gastos operativos del centro, la seguridad. Con los comerciantes se llegó a un arreglo de rebajarles costos, hay pocos parqueaderos, los arriendos de las zonas comunes, todo esto deja de entrar para sostener el centro comercial. Y creo que esto afectará todo el año.
-Lo que tenemos abierto no llega al 10%, tenemos un almacén ancla y yo me pregunto: ¿si en un almacén ancla se vende desde un huevo hasta una nevera, por qué no nos dejan abrir los otros?.
Tenemos abierto solo una entrada y un solo parqueadero con los limites señalizados de mucho espacio entre uno y otro. Tenemos temas de salud, laboratorios y bancos, los autorizados por la Alcaldía.
- El impacto será en lo económico. Sabemos que el Gobierno tiene la responsabilidad de la seguridad del pueblo. Pero también tiene que ver que los que cumplimos con las normas tenemos necesidades que cubrir. Esto en la historia no lo habíamos vivido.