La mayoría de los fallecidos eran trabajadores de un centro telefónico de atención al cliente que operaba las 24 horas del día en la última planta del edificio. Filipinas sufre además este fin de semana las consecuencias de la tormenta Tembin que ha causado 200 muertos y más de 150 desaparecidos.
Las autoridades filipinas dieron este domingo por muertas a unas 37 personas que quedaron atrapadas por un incendio que se originó ayer en el interior de un centro comercial en la
ciudad de Davao, en el sur del país.
El vicealcalde de la ciudad, Paolo Duterte, dijo que el jefe dela Oficina de Protección de Incendios (BPF, según siglas en inglés) le confirmó que no había ninguna opción de encontrar con vida a las personas desaparecidas.
"Recemos por ellos. Hace un rato el comandante sobre el terreno de BPF me anunció que las opciones de sobrevivir son cero", dijo Duterte, hijo del presidente del país, Rodrigo Duterte, en su cuenta de Facebook.
En el mensaje publicado de madrugada el vicealcalde adjuntó los nombres de los 37 desaparecidos.
La mayoría de ellos eran trabajadores de un centro telefónico de atención al cliente que operaba las 24 horas del día en la última planta del edificio, según la televisión ABS-CBN.
El fuego se declaró el sábado por la mañana en la tercera planta del centro comercial Nccc, en la que se vendían telas y mobiliario de madera y plástico, y seguía ardiendo a primera hora del domingo, añadió el canal.
El presidente filipino transmitió a los familiares de los desaparecidos las nulas esperanzas de encontrarlos con vida durante una visita anoche al centro comercial de Davao, ciudad en la que reside y de la que fue alcalde cerca de dos décadas.