Luego que recientemente se presentara un paro de conductores de servicio público de la ruta 221, que presta sus servicios en el sector de la Comuna 13, por la quema de una buseta al parecer por no pagar las denominadas "vacunas", los transportadores esperan que la implementación de la Tarjeta Cívica contribuya a hacerle frente al delito de la extorsión, aunque consideran que este medio de pago debe ir acompañado de otras medidas por parte del Estado.

En diálogo con EL MUNDO, Juan Gonzalo Merino, presidente de la Asociación de Transportadores del Valle de Aburrá (Asotransvaa), dijo que el fenómeno de la extorsión es un flagelo que afecta no sólo a los tranportadores sino a diferentes sectores de la economía, por lo que la Tarjeta Cívica contribuiría en parte a evitar que las empresas que movilizan pasajeros, paguen los cobros a los delincuentes.

Según el presidente de la Asociación, se ha visto la mejoría. “Al no tener efectivo el conductor porque los dineros se manejan a través del cliente, es difícil que la gente (los transportadores) cumpla con las exigencias" de las bandas al margen de la ley. 

Sin embargo, recalcó que la institucionalidad debe afianzar medidas de impacto social para reducir la delincuencia. "Al Estado le compete dar más oportunidades, generar más empleos para que realmente se mitigue el tema y que la gente esté ocupada y no esté pensando en causarles perjuicios a otras personas”. 

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Por su parte, la institucionalidad sigue trabajando para mejorar las condiciones de seguridad del gremio en la ciudad y en especial la Comuna 13, luego del paro y la quema de la buseta pertenenciente a la ruta 221 el pasado sábado.

En su momento, el secretario de Seguridad de Medellín, Andrés Tobón, dijo acerca de la quema del vehículo y las afectaciones a los transportadores de la Comuna 13, que “gracias a las cámaras del sector, a la ayuda ciudadana, en este momento estamos en un proceso de identificación completa de las personas que están detrás de este asunto y muy rápidamente podremos dar con la captura de los mismos para seguir garantizando la seguridad en el sector”. 

El Secretario recordó que recientemente ya se habían presentado denuncias por extorsiones. Frente a esto, aseguró que la Policía, de la mano con la Secretaría de Movilidad y la participación de los guardas de Tránsito adelantan acciones de control en los sectores sobre los que se han hecho denuncias por parte de los transportadores.

“Esta ruta en particular que es la ruta Belencito Corazón, recientemente fue intervenida positivamente por la Secretaría de Movilidad de Medellín”, por lo que a muchos de los buses que pertenecen a esta ruta se les implementó el sistema de cobro con Tarjeta Cívica.

Así, resaltó el funcionario, se sigue luchando contra el delito de la extorsión mediante la tecnología y “mecanismos más incluyentes en materia de democratización del transporte”.

Sin embargo, en su momento, el Secretario de Seguridad afirmó no tener certeza de que la quema del bus se debió al no pago de extorsiones.

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De igual manera hizo un llamado a los transportadores y la ciudadanía en general para que “sigan colaborando, a que sigamos trabajando juntos desde la legalidad y desde la institucionalidad en contra de las estructuras criminales y los bandidos, que lo único que quieren es el mal para los ciudadanos de Medellín”.

Según aseveró, con la Policía Metropolitana se garantizan todas las condiciones de seguridad para que se pueda prestar con normalidad el servicio, y que se siguen implementando puestos de control para contrarrestar la delincuencia.

En ese sentido, el general Óscar Gómez, comandante de la Policía Metropolitana, recalcó en su momento que la institución “ha adelantado diferentes labores investigativas y de prevención”.

Especificó que se implementaron acciones para que el Gaula acompañe al sector transportador en la jurisdiccón afectada.