Presencia de 200 policías y 200 soldados del Batallón de Operaciones Urbanas Especiales es una de las estrategias con las que el alcalde Federico Gutiérrez anunció el plan de intervención integral en el corregimiento de Altavista, luego su visita el pasado martes, en la cual quería conocer de primera mano la situación de orden público por los constantes enfrentamientos entre las estructuras delincuenciales de los chivos y los pájaros.

En estos hechos, varios conductores de transporte público fueron amenazados y les prohibieron que llevaran a cabo su trabajo, y según denuncias ciudadanas, se han dado varias extorsiones a negocios del sector.

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Federico Gutiérrez condenó los hechos, manifestando que las comunidades no deben tener temor y que estos delincuentes le está haciendo mal a este corregimiento con aproximadamente 38.000 habitantes, por lo cual se encuentran trabajando para dar captura a los cabecillas responsables del recrudecimiento de los enfrentamientos.

“Esto es un reciclaje de las violencia de las bandas. Los atrapamos, quedan en libertad y vuelven a armar el alboroto. Estamos detrás de tres cabecillas que están causado estos problemas en la comunidad de Altavista: alias el mono, que fue capturado por temas de estupefacientes en junio y luego lo dejaron en libertad y es líder de esas estructuras, alias conejo que pertenece a otra y alias chatán, que es cabecilla de los chivos; también lo soltaron y armó el alboroto”, argumentó Gutiérrez.

En este contexto, hizo nuevamente un llamado a la justicia para que actúe en contra de estos líderes de grupos ilegales que han sido dejados en libertad y reinciden en los crímenes.

Sobre los conductores intimidados, el mandatario explicó que “tenemos muy claro de donde vienen esas amenazas. Entendemos su preocupación y no vinimos a presionarlos, sino a acompañarlos. Vamos detrás de esas personas que les están causando temor. Lo único que quieren hacer los conductores es trabajar”.

El plan de la Alcaldía es “seguir llegando como Estado con educación y oportunidades porque estos grupos se convirtieron en un problema para la población; están mamados de la violencia”, según Gutiérrez.

Además, agregó lo importante de un plan integal de presencia institucional, ya que “durante muchos años, estructuras criminales se convertían en espacios de colaboración para las comunidades ante el abandono estatal”.