El uso de tecnología y la reducción de costos son los caminos que transita la Federación Nacional de Cafeteros para promover entre sus asociados las alternativas que les permitan alcanzar la meta de una mayor rentabilidad.
Incrementar la productividad como vía para mejorar la rentabilidad del sector cafetero colombiano, se ha convertido en casi una obsesión para la actual administración de la Federación Nacional de Cafeteros.
Los esfuerzos realizados para lograr dicha meta se han desplegado en varios frentes de trabajo, pero ha sido el área técnica la que ha desarrollado acciones más visibles, pues corresponde a esta, precisamente, enfocarse en el proceso de producción.
“Desde el área técnica tenemos dos caminos: uno, incrementar la productividad contribuyendo con tecnología, y el otro, contribuir en la reducción de costos”, explicó Hernando Duque, gerente técnico de la Federación Nacional de Cafeteros.
En la búsqueda del incremento de la productividad, la Federación comenzó a implementar a finales de 2015 la estrategia “Más agronomía, más productividad”, cuyos actores principales son el Centro Nacional de Investigaciones de Café, Cenicafé, y el Servicio de Extensión.
“Buscamos que el manejo agronómico de los cultivos y que todas las prácticas y decisiones agronómicas sean concordantes con un cultivo productivo y resilente. Hay estudios que demuestran claramente que en la medida en que el caficultor sea más productivo, hay una contribución importante en la reducción del costo unitario por arroba”, explicó el gerente técnico.
Nuevas variedades de café, manejo de suelos y conocimiento de las características de las zonas geográficas son algunas de las posibilidades que, con apoyo científico, tienen los caficultores para mejorar su productividad.
En cuanto a las variedades, durante los congresos cafeteros de 2016 y 2017 Cenicafé liberó cuatro nuevas variedades: Cenicafé 1, Castillo Zona Norte, Castillo Zona Centro y Castillo Zona Sur las cuales tienen, entre sus características, la resistencia durable a la roya.
“Las variedades son el eje de los sistemas de producción y son, hablando coloquialmente, los cimientos de la caficultura”, afirmó Hernando Duque, gerente técnico de la Federación Nacional de Cafeteros, y añadió que, por esa misma razón “no es normal que una institución produzca variedades con tanta frecuencia, pero resulta que los programas de mejoramiento genético de Cenicafé son muy fuertes y estamos trabajando ya en busca de nuevas variedades”.
En otro frente de acción, se busca que los caficultores adopten densidades de siembra mayores y también que reduzcan la edad promedio de las plantaciones, para lo cual el proceso de renovación de cafetales juega un papel importante.
“En este sentido vienen un conjunto de prácticas agronómicas que son cruciales para la producción de café, como el manejo de la acidez del suelo, el manejo de la nutrición de los cultivos y tener claridad acerca de qué tipo de luminosidad o qué tipo de sombrío debo tener en mi cultivo de café dependiendo de la zona geográfica donde me encuentre”, agregó Duque.
Para el gerente técnico de la Federación, Colombia tiene tecnología para producir más de 20 sacos por hectárea y llegar hasta 22 sacos en el largo plazo. “Hay que buscar es una mayor adopción (de estas prácticas) por parte de los caficultores, para que la productividad se incremente a esos niveles”, reiteró.
Desde el punto de vista de la reducción de costos, la Gerencia Técnica de la Federación plantea dos alternativas principales: el uso de nuevos fertilizantes y el uso de la tecnología para la recolección del grano.
“Cenicafé contribuyó a generar dos tipos nuevos de fertilizantes que los está comercializando Agroinsumos del Café, que es un empresa del gremio, y se llaman Agrocosecha y Producafé”, anunció Hernando Duque.
Estos fertilizantes, explicó, fueron diseñados con base en los análisis de suelos que ha hecho la Federación de Cafeteros, que son cerca de 300.000, incorporando la fertilidad natural de los suelos y aportando elementos faltantes.
Ambos productos, según el gerente técnico Hernando Duque, “permiten reducir los costos de fertilización por hectárea -para aquellos caficultores que fertilizan en niveles altos- en cerca de un millón de pesos por hectárea/año”.
Con respecto a la tecnología para la recolección, los cafeteros tienen a su disposición las Lonas para Cosecha Asistida, las cuales pueden utilizarse para cosecha manual.
“El recolector simplemente desprende el fruto y cae a la lona, con un incremento en la productividad por encima del 30%”, explicó el directivo.
La otra alternativa es la Derribadora Selectiva de Café, que permite aumentar en un 50% el derribamiento de grano con respecto al proceso manual convencional.
“La receptividad de la derribadora la hemos observado muy positiva en la mayoría de las personas, hay una muy buena expectativa porque los caficultores han visto que la derribadora está tocando un tema de alta sensibilidad que es el costo de la recolección y también está en función de poder servir en momentos de escasez de mano de obra”, expresó Duque.
La Federación de Cafeteros espera que en el mes de marzo estas máquinas estén en el mercado para ser adquiridas por los caficultores: “Nuestra expectativa es que el uso se vaya masificando con el paso del tiempo, en la medida en que los caficultores aprendan a manejarla”, finalizó.
Durante la segunda jornada del Congreso Nacional de Cafeteros, precisamente el ministro de Comercio, Industria y Turismo, José Manuel Restrepo, elogió las buenas prácticas del sector y las iniciativas de diversificación de sus ingresos.
“Aquí no estamos hablando solamente de un sector productivo, sino de un signo de la identidad nacional. (…) Ustedes son mucho más que un sector productivo; ha sido un sector que ha dado un sello distintivo a esta nación, que se ha convertido en el paradigma de que efectivamente es posible producir, exportar y construir equidad”, dijo Restrepo.
El titular de la cartera de Comercio destacó que el sector cafetero ha superado con resiliencia sus dificultades, como por ejemplo la de los precios internacionales “demostrando que es posible aumentar la productividad como lo han venido haciendo, que es posible contribuir a la diversificación de ingresos como se ha hecho a través de modelos como el Paisaje Cultural Cafetero y todo el desarrollo del turismo alrededor del sector cafetero, y contribuir también a hacer un país más equitativo y con mayores posibilidades de generación de empleo y con un crecimiento incluyente”, puntualizó el ministro Restrepo.
El Ministerio de Comercio, Industria y Turismo presentó a los delegados al Congreso Cafetero las cifras sobre el peso del sector en la economía del país, tales como que representa el 22% del PIB agrícola, el 8% del PIB industrial, el 2,5% del PIB total y el 25% de los puestos de trabajo del sector agropecuario en Colombia.