En un comunicado expedido este jueves, el Cicr aseguró que el personal médico ha recibido amenazas, lo que pone en riesgo la atención y el cuidado de las personas de la región.
El Comité Internacional de la Cruz Roja (Cicr) y la Cruz Roja Colombiana hicieron un "llamado urgente" para que se respete al personal médico y la infraestructura sanitaria en la región del Catatumbo, zona fronteriza con Venezuela.
El Cicr pidió a través de un comunicado que se respete en "toda circunstancia" al personal, las instalaciones y los medios de transportes sanitarios, ya que su protección es esencial para "garantizar el derecho a la salud".
La alerta se generó por los recientes enfrentamientos en la región del Catatumbo entre el grupo guerrillero Ejército de Liberación Nacional (Eln) y el Ejército Popular de Liberación (Epl), considerado por el Gobierno como una banda de narcotraficantes.
El Catatumbo es una de las zonas más pobres y olvidadas de Colombia y está conformada por los municipios de Convención, El Carmen, El Tarra, Hacarí, La Playa, San Calixto, Sardinata, Teorama y Tibú.
En dicha región, del departamento de Norte de Santander, los dos grupos armados se han enfrentado por el control del territorio que abandonó la extinta guerrilla Farc tras su desmovilización,
situación que se agrava por un paro armado decretado por el Epl.
"Impedir que la Misión Médica preste sus servicios es injustificable", afirmó el jefe de la Delegación del Cicr en Colombia, Christoph Harnisch.
Según el Comité, evitar el correcto funcionamiento del personal médico, que ha recibido amenazas, puede aumentar la tasa de mortalidad, además de incrementar las enfermedades "por falta de tratamiento y de programas de prevención".
Por su parte, la presidente de la Cruz Roja Colombiana, Judith Carvajal de Álvarez, aseguró que "es indispensable garantizar la atención en salud de toda la población".
Agregó que "interferir con la misión médica puede poner en peligro a muchas personas que necesitan atención y cuidado por parte de personal calificado".