De acuerdo con el gremio ganadero, el país dejó de producir 80.000 toneladas de carne en los últimos tres años.
Un análisis sobre las cifras de sacrificio bovino de los últimos tres años, realizado por la Federación Nacional de Ganaderos (Fedegán), muestra un panorama agridulce, pero con una tendencia preocupante sobre su futuro.
Así lo señaló José Félix Lafaurie, presidente ejecutivo de la organización, quien advirtió que hoy el sector ofrece menos carne a los consumidores colombianos.
“Colombia dejó de producir 80.000 toneladas de carne vacuna en los últimos tres años, lo que es consecuencia lógica de la disminución del hato, de la ausencia de políticas públicas para dinamizar el sector, y del sacrificio ilegal, entre otros problemas que afronta la ganadería colombiana”, precisó.
Añadió que son evidentes las falencias en el sector originadas en la destrucción de vías terciarias, especialmente en invierno, en el aumento de la inseguridad registrada por el alarmante crecimiento del abigeato y el carneo, y desde luego en la competencia desleal que representa el desmesurado contrabando, y la ausencia de políticas públicas que han olvidado por completo el tema del repoblamiento bovino o de mejorar las condiciones de crédito para el sector agropecuario en general.
Señaló además que en el período enero-septiembre de 2015 comparado con igual período de este año, el sacrificio cayó en cerca de 436.000 cabezas que, en términos porcentuales, representa una caída de 17,3%. También se puede ver en el número de reses que sí fueron sacrificadas. Mientras en 2015 se faenaron 2'953.463 cabezas, este año fueron 2'517.674 animales.
“La contracción del sector es de tal magnitud, que entre estos dos periodos nuestra actividad económica dejó de percibir cerca de 939.000 millones de pesos”, manifestó Lafaurie.
A su vez, agregó el dirigente gremial, la parte positiva del análisis de las cifras del Dane es que demuestran que los ganaderos han estado haciendo la tarea de aumentar eficiencia a su producto, los cual se refleja en los indicadores de peso de la carne en canal (listo para la venta), y aumento de peso del animal listo para el sacrificio.
“Hoy los ganaderos están llevando a sacrificio animales más pesados. Los animales se entregan con un peso promedio de 448,9 kilogramos (machos), mostrando un importante aumento de 9,6 kilos por animal, que representa un aumento de peso de 2,1%”.
En cuanto al rendimiento de la carne en canal, se ha ganado 1,1 kilos más en machos, que equivale a un incremento de 2,1 %. Para hembras también aumentó pero levemente, al pasar de 51,3% a 51,5%.
Hoy se produce menos carne
“De mantenerse esta tendencia en la producción de carne, a la vuelta de pocos años nuestra ganadería sería desplazada por las importaciones, máxime que ya nos acercamos a la apertura total con los TLC, y economías como la de México que buscan donde colocar sus productos luego de que el Tlcan muestra resquebrajamiento, o como la de Brasil que ve dificultades cada día mayores en colocar sus productos en Rusia y en los mismos Estados Unidos”.
“Las cifras hablan por sí solas, y se convierten en un llamado para el Gobierno, para enderezar el rumbo que se perdió estos últimos tres años. Aún hay tiempo”, concluyó, Lafaurie Rivera.
Los señalamiento se trataron de contrastar con la versión del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, pero no se consiguió respuesta.