Los hechos ocurrieron en Norte de Santander y Cesar y responden a la ofensiva terrorista desatada por esa guerrilla tras su convocatoria a un llamado “paro armado” en todo el país.
Dos personas muertas y dos peajes dinamitados es el resultado de las acciones registradas en la madrugada de este domingo en los departamentos del Norte de Santander y Cesar en el segundo día del llamado "paro armado" de la guerrilla del Eln.
Según la agencia EFE, que cita al diario La Opinión de Cúcuta, las dos personas que murieron iban a colocar explosivos en el puente El Palermo, en el municipio de Bochalema, en Norte de Santander.
La información citada agrega que en el sector en donde perdieron la vida esas dos personas se encontraron dos cédulas de ciudadanía venezolanas. Las autoridades colombianas investigan si esos documentos pertenecen a los fallecidos.
Además, en un barrido realizado por las autoridades fueron hallados otros explosivos debajo del puente que fueron desactivados por artificieros del Ejército.
Debido a la situación, el Instituto Nacional de Vías (Invías) informó en su cuenta de Twitter que las autoridades cerraron preventivamente la carretera entre Cúcuta y Pamplona, en Norte de Santander.
De otro lado, el comandante de la Segunda División del Ejército, el general Jaime Carvajal, informó que dos peajes, uno en Aguachica y otro en Gamarra, en el departamento del Cesar, fueron atacados con explosivos en la madrugada de este domingo.
El primer hecho se registró en el kilómetro 14 del tramo entre la población cesarense de Aguachica y Ocaña, en Norte de Santander.
El ataque fue perpetrado por dos hombres que llegaron en carro al peaje y ordenaron a los dependientes abandonar la instalación y colocaron la carga explosiva que luego fue detonada.
La segunda acción ocurrió en el kilómetro 8 de la vía entre Gamarra y Aguachica.
En estos ataques no hubo muertos o heridos.
Los dos peajes fueron instalados para financiar la transversal Río de Oro-Gamarra, obra incluida en el contrato entre la Concesionaria Ruta del Sol (Consol) y la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), y que está parada desde hace un año por el escándalo de los sobornos que pagó en Colombia la multinacional brasileña Odebrecht.
Las acciones contra estas estructuras se suman a una seguidilla de ataques con explosivos en corredores viales del departamento del Cesar ocurridas el sábado por parte del Eln que activó cargas explosivas que dañaron un puente y una carretera.
Los dos atentados, uno en el caserío de La Mata, y el otro en la localidad de Curumaní, en la carretera que comunica al interior del país con la costa Atlántica coincidieron con el inicio del "paro armado" anunciado el miércoles pasado por el Eln para presionar al Gobierno a reiniciar los diálogos de paz en Quito.
De otro lado en Antioquia, una tractomula fue incinerada en la vía que comunica a Yarumal con Validivia, en el sector de El Socorro, presuntamente integrantes del Eln.
El hecho habría ocurrido sobre las 6:30 de la mañana en juridicción del municipio de Valdivia, cuando diez hombres pidieron al conductor del vehículo descender del mismo. Otro vehículo del mismo tipo también fue atravesado en esta vía, pero no fue incinerado.
El Instituto Nacional de Vías, Invías, anunció el cierre total preventivo de esta vía.
El presidente Santos, dijo ayer que "va a ser muy difícil" reanudar los diálogos de paz con el Eln si ese grupo no muestra coherencia entre sus acciones y sus palabras.
Aseguró que el Eln no tiene capacidad de dar golpes militares y que solamente puede cometer "actos de terrorismo", de los que dijo afectan a la "población civil y al medio ambiente que dicen defender".
Las negociaciones de paz entre el Gobierno colombiano y el Eln están paralizadas desde el pasado 10 de enero, tras una escalada de ataques perpetrados por esa guerrilla.