En el conjunto tierra-agua de Ayapel conviven 31 especies de mamíferos, 194 especies de aves (64 de ellas migratorias) y 46 especies de peces.
En el día mundial de los Humedales, el Complejo Cenagoso de Ayapel, el segundo humedal más grande e importante del país, fue declarado territorio Ramsar.
La adhesión de Colombia a los compromisos por la protección de este humedal se firmó este viernes 2 de febrero con la presencia del Ministro de Ambiente, Luis Gilberto Murillo.
Además, la firma contó con la presencia del director de Conservación Internacional Colombia, Fabio Arjona, el director de CorpoAyapel, Nicolás Ordóñez Ortega, el director de la CVS, José Fernando Tirado, el coordinador Programa Agua Dulce de WWF, José Saulo Usma, la directora ejecutiva de Omacha, Dalila Caicedo Herrera y el gerente ambiental de Fondo de Adaptación, Luis Lizcano.
La Convención Ramsar es un tratado intergubernamental en el que participan el 90 % de los estados miembros de las Naciones Unidas cuyo objetivo es la conservación y uso racional de los humedales para lograr un desarrollo sostenible en todo el mundo. Los expertos aplican una amplia definición de los humedales, que abarca lagos, ríos, acuíferos subterráneos, pantanos y marismas, pastizales húmedos, oasis, entre otros.
Gracias al trabajo conjunto de CorpoAyapel, la Universidad de Antioquia, la Corporación de los Valles del Sinú y el San Jorge (CVS), Conservación internacional, la WWF y el Ministerio de Ambiente, finalmente se logró la Convención para la protección de la Ciénaga de Ayapel, la cual cuenta con 31 especies de mamíferos, entre ellos manatíes; 194 especies de aves, de las cuales 64 son migratorias y provienen principalmente de Estados Unidos y Canadá; además de 46 especies de peces y vegetación propia de este tipo de ecosistemas, imprescindible para el desarrollo de la vida animal.
“Que el Complejo Cenagoso de Ayapel sea un territorio protegido bajo la Convención Ramsar, el segundo humedal más grande del país, es una gran victoria para el departamento de Córdoba, para Colombia y toda su biodiversidad. Es gratificante ver los frutos de un trabajo conjunto en pro de la protección y recuperación de la riqueza natural del país, que además ayudará al desarrollo sostenible del municipio de Ayapel y todos sus habitantes”, afirmó Nicolás Ordóñez, director ejecutivo de Corpoayapel.
Este logro, liderado por CorpoAyapel, organización sin ánimo de lucro que trabaja por el desarrollo sostenible de la Ciénaga y todos sus habitantes desde hace 15 años, es de gran importancia para el patrimonio natural de la nación, puesto que la Ciénaga se ha visto afectada por la minería ilegal en sus ríos, que remueve sedimentos que envenena a los peces con mercurio, generando una grave afectación económica y sanitaria para sus pobladores, esto sumado al inmenso daño ambiental.
La minería ilegal y el cambio climático han contribuido para generar grandes inundaciones sin precedentes, que han comprometido el 80% de la cobertura vegetal, afectando igualmente la vida animal que la habita.
La Universidad de Antioquia ha realizado varias investigaciones en Ayapel, según las cuales se calcula que se necesitan aproximadamente 30 años y la siembra de miles de plantas para que el territorio se recupere de la degradación minera y los efectos del calentamiento global.
La declaración Ramsar abre una nueva etapa de esperanza para la recuperación de la Ciénaga y su comunidad; y para ello, CorpoAyapel implementará su plan de rehabilitación participativa, que busca sembrar un millón de árboles, además de su programa de educación ambiental en la primera infancia y colegios para convertir a las futuras generaciones de la comunidad en embajadores y protectores de la biodiversidad de la Ciénaga.