Tenemos una gran facilidad e inclinación para firmar Acuerdos o Tratados de Paz, que finalmente desembocan en su incumplimiento
Como veíamos y comentábamos ayer, los humanos tenemos una gran facilidad e inclinación para firmar Acuerdos o Tratados de Paz, que finalmente desembocan en su incumplimiento y en el inicio de nuevos conflictos que tratan de ser superados mediante la firma de nuevos Acuerdos y Tratados, y ahí nos vamos entreteniendo y nos vamos yendo, sin que jamás hayamos conseguido una paz duradera.
En (1.659 DC y en 1.713 DC) se firman nuevamente y respectivamente la Paz de los Pirineos y la Paz de Utrecht entre Francia y España. Por el Tratado de Viena de (1.725 DC) Carlos VI aceptó a Felipe V. En (1.763 DC) se firma la Paz General de París que pone fin al conflicto entre Prusia y los aliados Austria y Francia. En (1.795 DC) España y Prusia firman el Tratado de Paz de Basilea y Prusia y Holanda por el Tratado de la Haya. El Armisticio de Leoben y la Paz de Campo Formio en (1.797 DC) ponen fin a la guerra entre Francia y Austria. Lo anterior se ratifica con la firma de la Paz de Lernesville por parte del Emperador Francisco II y luego Inglaterra firma el Tratado de Amiens. En (1.809 DC) Francisco II firma la Paz de Viena. Luis XVIII firma el Tratado de París y devuelve los territorios ocupados por Napoleón, que a su vez serán redistribuidos por el Congreso de Viena de (1.814 DC).
En (1.815 DC) las Monarquías Europeas con el aval del Papa, firman La Santa Alianza, por el cual las Monarquías Europeas se comprometen a apoyar a cualquiera de esas Monarquías para controlar y defender las nuevas Colonias Ultramarinas. En (1.856 DC) en el Congreso de Paris, Francia, Inglaterra y Cerdeña apoyan a Turquía en contra de Rusia. En (1.866 DC) por el Tratado de Praga cesan las hostilidades entre el Imperio Alemán y Austria. Por el Tratado de Francfort de (1.871 DC) se firma la paz entre Francia y Alemania. En (1.877 DC) el Congreso de Berlín autoriza a Alemania a apoyar a Turquía ante un nuevo ataque de Rusia.
El Siglo anterior, no fue diferente. En (1.905 DC) se formaliza la Trile Alianza entre Alemania Austria-Hungría e Italia. En (1.905 DC) se firma Tratado de Paz entre Japón y Rusia y se establece La Triple Entente entre Francia, Rusia e Inglaterra. Para poner fin a la Primera Guerra Mundial se crea la Liga de las Naciones en (1.918 DC) y se firma el Tratado de Versalles en (1.919 DC).
En (1.945 DC) se funda la ONU y se realiza la Cumbre de Yalta, piedra angular del Nuevo Orden Mundial, del cual quedan todavía varios vestigios. Hechos menos graves que la Segunda Guerra Mundial dan origen a nuevos Acuerdos y Tratados como el de Trianón que da por terminado el Imperio Austro-Húngaro, el Tratado de Neuilly con Bulgaria, el tratado de Sévres con Turquia, el tratado de Belfast entre Irlanda del Norte y el IRA, el Acuerdo en Filipinas, el Acuerdo del País Vasco entre el Estado y la ETA, el Acuerdo de Paz entre las FARC y el Estado Colombiano, entre otros varios.
Este recorrido parcial, nos ilustra acerca del comportamiento de las Relaciones Internacionales a través de la Historia reciente de Occidente. Pocos actores, que se juntan o se separan por conveniencia, tratando de consolidar sus sempiternos poderes, y teniendo en el caso de occidental a una Iglesia Católica que ha servido de fiel para desequilibrar las balanzas en diferentes momentos.
Al leer, releer o auscultar la historia universal, se pierden la ilusión, la esperanza y la convicción de que un mundo sin conflictos es posible.
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Los hechos y los acontecimientos de los cuales son actores las generaciones anteriores, así lo demuestran.
Queda una última esperanza: que ante la posibilidad creciente de encontrar evidencias de vida en otros lugares del universo, esta nueva realidad nos convoque y nos invite a todos a comportarnos como debe ser: Como terrícolas.
Insisto en la necesidad de dotar a Medellín de un adecuado Centro de Espectáculos.