A primera hora del día, las autoridades municipales y departamentales instalaron el puesto de mando unificado y dieron un parte de tranquilidad para las elecciones de Congreso de este domingo en Antioquia.

Victoria Eugenia Ramírez, gobernadora ad hoc de Antioquia, anunció en las primeras horas de la jornada que el 100% del departamento estaba cubierto, aunque se presentaron dificultades en Ituango para instalar las mesas de votación, al igual que en San Onofre (Sucre) y Francisco Pizarro (Nariño).

Sobre las 10:00 de la mañana ya la plataforma Uriel, del Ministerio del Interior, registraba 1.135 denuncias por delitos electorales en el país, situando a Bogotá D. C., Antioquia y Valle del Cauca en los primeros lugares en el registro de denuncias a través de este portal.

En las mesas de votación, los electores fueron llegando desde temprano con una afluencia moderada, pero teniendo picos en ciertas horas del día, en los que podían acumularse varias personas en las mismas, según confirmaron jurados de votación de la Institución educativa Alfonso Mora Naranjo, ubicado en el barrio Campo Valdés (Comuna 4 de Medellín). En uno de los pasillos un votante desprevenido le comentó a otro que había ido a votar “en defensa de la democracia”.

Hasta el momento, el ambiente de la jornada seguía siendo tranquilo, aunque en sitios aledaños a la iglesia La Asunción (Santa Cruz), contigua a un puesto de votación, seguían repartiendo propaganda electoral.

Sin duda, el momento clímax de la jornada fue cuando en al menos 33 puestos de votación en Medellín, seis ubicados en El Poblado, no contaban con el material electoral completo para llevar a cabo este ejercicio; faltaba el de la Gran Consulta por Colombia. En Eafit, donde se tiene un potencial de más de 18.000 votantes y 53 mesas de votación, gran cantidad de personas protestaron porque se hubieran acabado los tarjetones.

Al unísono reclamaron diciendo “tarjetones, tarjetones”, cuando en redes sociales diversos ciudadanos denunciaron que tenían que firmar un acta, volver más tarde o esperar a que la Registraduría diera una solución. Si bien se repartieron 15 millones de tarjetones de esta consulta en el país y 15 para la Consulta Inclusión Social para la Paz, la primera se agotó en los puestos de votación mencionados, por lo que fue necesario sacar fotocopia a los originales, repartirlos por la ciudad y establecer que tenían validez sólo con la firma de un jurado de votación.

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El hecho generó inconformismo en la ciudadanía. Carlos Alberto Robledo, quien se encontraba desde las 9:00 de la mañana en la Universidad Eafit (Comuna 14) mostró su descontento por el suceso. “Me parece lo peor que yo he visto en mi vida en una votación. Siempre me ha tocado aquí en Eafit y es primera vez que ocurre una cosa como esta, es absurdo que existan tarjetones para votar por Petro en todas las mesas y los que somos de Iván Duque, o de Marta Lucía o de Ordóñez, no hayan tarjetones” , señaló.

Y es que, una vez el Registrador Nacional, Juan Carlos Galindo, indicó que los protocolos para este tipo de situaciones hacían válido sacar fotocopias, la ciudadanía consideró que era posible que se diera un fraude.

Gloria Calle, también votante en este puesto, calificó como raro el hecho de que los votantes no pudieran solicitar el tarjetón de la Gran consulta por Colombia. “Es muy raro que sólo se acabaron los del Centro Democrático en la Consulta y de todo lo otro hay. ¿Qué significa eso? Que los escondieron, todo el mundo aquí es corrupto y aquí no hay con quién hablar”, criticó.

En otros sitios de la ciudad, como el Estadio, si bien la jornada transcurrió en calma y los tarjetones no se acabaron, los ciudadanos evidenciaron lo que ocurrió en los 33 puestos de votación afectados. Girley Carvajal Guzmán atribuyó la falta de material a que “no estaban preparados para que todo el mundo saliera a votar y no están preparados para que Colombia se pare y diga: 'no más'”.

Sobre las 2:00 de la tarde todavía habían filas en la Universidad Eaift para votar y los presententes protestaban porque de igual manera se cerrarán las mesas a las 4:00 p.m., como es habitual.

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En Antioquia hubo 1.040 puestos de votación; 13.241 mesas, con un potencial 4686.767 personas aptas para votar; 90.000 jurados, 3.000 supernumerarios en todos los puestos de votación (urbanos, rurales y cárceles).

Salir a votar

Dos ciudadanos contestaron sobre sus motivaciones para participar en esta jornada electoral.

“No podemos seguir regalando a Colombia, no podemos seguir entregando nuestro país con todas las riquezas que tenemos al son de querer que nos regalen un tamal o cualquier cosa que se ve como en las zonas más humildes, para seguir con la corrupción. Hay que ponerle un punto final a esto. No podemos seguir siendo la Colombia pobre, si nosotros que somos el pueblo no nos revolucionamos y no salimos a decir no más de tanta violencia”, expresó Girley Carvajal Guzmán, estudiante votante en el Estadio Atanasio Girardot.

“Es importante salir a votar para poder opinar, porque si usted no ayuda o no hace algo, no puede opinar. Uno tiene que demostrar su libre movimiento político como sea. Siempre la gente se ha abstenido, pero eso es normal, como todos prometen pero cuando están por allá usted sabe. esa es la ley de la vida”, dijo Jorge Vélez, ciudadano votante en la IE Alfonso Mora Naranjo.

 Los delitos electorales 

El último reporte del Ministerio del Interior, a través de la plataforma Uriel, mostró que se reportaron al menos 827 presuntos delitos o quejas más desde el reporte de las 10:00 de la mañana, es decir 1.962 en total al cierre de las 3:45 de la tarde, ubicando los delitos de constreñimiento al sufragante, intervención en política por parte de servidores público y corrupción al sufragante en los primeros lugares.

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Así, Bogotá culminó en primer lugar con 314 denuncias, seguido de Antioquia con 213, Santander con 138, Valle del Cauca con 135 y Cundinamarca con 105.

Igualmente, las cinco ciudades con mayores registros fueron además de la capital colombiana, Medellín con 82 denuncias, 65 en Cali, Barranquilla con 55 y cartagena con 48.