El buque será parte de la flota de la Fuerza Naval de Honduras con el propósito de defender la soberanía, combatir el narcotráfico en los espacios marítimos y prestar servicio logístico en caso de emergencia y desastres naturales.
El buque hondureño “Gracias a Dios”, construido en astilleros de Cartagena de Indias, llegó este viernes a Puerto Cortés, en el Caribe de Honduras, para sumarse a la Fuerza Naval del país centroamericano.
Una fuente de la Casa Presidencial en Tegucigalpa dijo que la embarcación será inaugurada este sábado en Puerto Cortés y que luego de la ceremonia será cargado con ayuda diversa para los habitantes del departamento de Gracias a Dios, en el Caribe, fronterizo con Nicaragua.
Se espera que la inauguración sea encabezada por el presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, en cuyo mandato, que inició en enero de 2014, se ordenó la construcción del buque, que será el insignia de la Fuerza Naval hondureña.
Hernández dijo el 30 de octubre que con el “Gracias a Dios” su país fortalecerá la seguridad en sus fronteras marítimas y atenderá las regiones de difícil acceso.
El Buque de Apoyo Logístico y Cabotaje (Balc) “cuenta con la capacidad para subir entre dos a cuatro lanchas interceptoras para combatir al tráfico de drogas por la región”, según lo expresado por el presidente hondureño.
Una de las ventajas del buque es que no necesita muelle para llegar a la orilla del mar y que a través de sus rampas se puede descargar el material para facilitar el traslado y ahorrar tiempo en la ejecución de proyectos.
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“Es un buque de carga” y “va a ser un importante apoyo” para el programa oficial de asistencia social “Vida Mejor”, porque “costó mucho” llevar todo el soporte logístico a la Mosquitía, fronteriza con Nicaragua, señaló Hernández.
El buque tiene un costo de 13,5 millones de dólares, desarrolla una velocidad de nueve nudos, tiene una autonomía de navegación de 40 días con 15 personas, una eslora de 49 metros y una manga de once.
Su calado es de 1,5 metros, puede transportar 210 toneladas en la cubierta de carga y dispone de modernos equipos de comunicación y dos generadores de energía, entre otros recursos, según las autoridades hondureñas.