Algunas comunicaciones se han caracterizado por errores que podrían haber hecho decaer la confianza, estimular la indisciplina social y haber incrementado el número de personas muertas y contagiadas.
El gobernante local, regional o nacional que cante victoria a estas alturas está perdido, pues en América Latina la crisis sanitaria por la covid-19 apenas comienza y se viene el momento del famoso pico, quizá un rebrote cómo ha ocurrido en países de Europa y un tiempo de convivencia con este microscópico enemigo mientras se descubre y masifica la anhelada vacuna.
Mientras pasan estas etapas, conviene mirar alrededor del planeta las buenas y malas prácticas desde algunos gobiernos locales en el permanente ejercicio de ensayo-error que supone este hecho inédito para nuestra generación y seguir tratando de acertar desde el liderazgo público de un gobierno o como integrante de este.
Afirma la OMS que un 80% de nosotros tendremos el virus pero quizá un bajo porcentaje requiera del apoyo de unidades de cuidados intensivos y un porcentaje cercano al 90% pueda superar este terrible virus, en una estadística que es coherente con las cifras de personas recuperadas que hemos visto a la fecha, en muchos casos gracias a la forma cómo la comunicación de gobierno ha cumplido un papel integral para que los ciudadanos tomen conciencia y asuman posturas de prevención y distanciamiento físico en sus labores cotidianas.
Sin embargo, también hemos visto algunas alcaldías, prefecturas, gobernaciones e incluso gobiernos nacionales cuyos voceros, gabinete, medios propios, redes sociales y otros escenarios de contacto se han caracterizado por errores que podrían haber hecho decaer la confianza, estimular la indisciplina social y haber incrementado el número de personas muertas y contagiadas.
Como parte de un ejercicio de formación a personal de gobierno en todo Colombia, la Fundación Colombia Líder y la Consultora Jaramillo Luján Estrategia y Comunicación han venido compartiendo con diferentes integrantes de equipos en alcaldías, gobernaciones, juntas administradoras, concejales, diputados, cabildantes y asesores, este escalafón con los cinco errores más recurrentes que vienen cometiendo los gobiernos en Colombia en su ejercicio de comunicación en tiempos de Covid 19.
Hay que bajarse del pedestal, del carro oficial, salir de la oficina y gastar suela, saliva y sudor en las calles, parques y veredas para conversar con los usuarios de nuestros servicios, el gobernante que piense que solo haciendo las cosas bien va a lograr el respaldo y la legitimidad de los ciudadanos se equivoca.