Directivos y estudiantes buscan salidas para salvar el semestre académico y evitar la cancelación.
¿En la movilización de estudiantes y profesores de la educación superior en Colombia cuándo se pone en riesgo el semestre académico? A esa pregunta no es factible determinarle una respuesta, pues se debe considerar que mientras la mesa de concertación nacional siga suspendida, no existe información del día ni la hora para el reinicio de las clases.
En tanto, los estudiantes y profesores de las dos universidades públicas de Medellín, la Universidad de Antioquia, UdeA, y la Universidad Nacional, Unal Medellín, continuarán sin saber a ciencia cierta qué pasará con el segundo semestre académico de este 2018.
Situación igual viven los estudiantes de El Poli, Politécnico Colombiano Jaime Isaza Cadavid, que se unieron al paro nacional por la crisis de desfinanciación de la educación superior pública.
Lo cierto es que antes del inicio de las Asambleas Permanentes al interior de las mismas universidades y de las movilizaciones nacionales que se han hecho en este último mes y medio, ya habían corrido seis semanas, en las que el semestre académico, iba a plenitud.
Ante ese incierto panorama, quedan dos posibilidades, continuar con la suspensión del semestre, en lo que queda de este mes de noviembre, o tomar la “dura” decisión de cancelarlo.
Elmer Gaviria Rivera, vicerrector General de la Universidad de Antioquia, contó a EL MUNDO que en ese claustro universitario de la ciudad, al momento, no han considerado, como salida a la situación de la movilización nacional, la cancelación o suspensión del semestre.
Ese es un alivio para la comunidad educativa de ese lugar. No obstante, Santiago Vélez, coordinador de Juntos UdeA, afirmó que aunque en cada universidad se está dando la discusión sobre el semestre, “nosotros tenemos la consideración de que lo prioritario es rescatar la universidad y su viabilidad a futuro. Es claro que el semestre se retomará cuando hayan esas garantías de continuidad financiera, no solamente para terminar un semestre académico sino para que la universidad siga vigente en nuestra sociedad”, dijo.
No obstante, continuó el vicerrector, “entendemos que el tiempo avanza y sí apremia tomar una decisión que nos permita considerar, reiniciando actividades en un determinado momento, ¿cómo podríamos culminar el semestre? La apuesta de nosotros es clara, tratar de salvarlo, entendiendo que el tiempo nos está acosando en una forma permanente”.
Otro punto que es preciso en esta situación, es que ya este año no se logró terminar semestre, y ante ello, desde la UdeA se lanzó una propuesta, “por ejemplo, una movilización ya escalonada del movimiento estudiantil y profesoral, pues eso ya nos permitiría reprogramar el semestre”, declaró Gaviria Rivera.
Y es que la incertidumbre que se tiene al interior de las universidades en este momento es porque “no hay garantías para entrar a analizar la salvación del semestre”, dijo la rectora de la Universidad Nacional, Dolly Montoya.
Precisamente, para analizar esas garantías se tendría que tener una fecha de inicio, y ahí el vicerrector General de la Universidad de Antioquia explicó que no se puede hablar de las mismas en un semestre que posiblemente tenga que ser especial, por las características de lo que ha significado esta movilización y las asambleas permanentes.
Ahora bien, “tendremos que entrar a analizar esas garantías en el momento en el que tengamos una fecha de inicio, y a hoy no la tenemos”, enfatizó.
También, está claro que esa fecha de reinicio no depende de la administración universitaria ni de los Consejos Académicos, depende del movimiento estudiantil y profesoral, y ello, reiteran los estudiantes, está sujeto al avance de los diálogos con el gobierno.
Javier Ortiz, líder estudiantil de la Unal sede Medellín y presidente regional de la Asociación Colombiana de Representantes Estudiantiles, Acrees, expresó: “Hoy nos planteamos que no queremos cancelación de semestre. Creemos que se puede solventar de otras formas, puede ser haciendo unos recortes en las vacaciones e intensificando un poco las actividades académicas, y no la queremos porque eso afecta el tema financiero en el pago de las matrículas, nosotros los estudiantes tendríamos que volver a pagarlas, eso es lo que más nos preocupa”.
Por los lados de la Universidad Nacional se dio un ultimátum a los estudiantes para regresar a las aulas, la rectora aseguró que se tomarán medidas como el aplazamiento del semestre si no se normaliza el ciclo académico el próximo martes, 13 de noviembre.
Ante el llamado que hizo Dolly Montoya, Javier Ortiz respondió: “La movilización es de los estudiantes y profesores, por tanto, nosotros decidimos también cuando regresar a las clases, y, repito, es una decisión que depende de la mesa de negociación. Nosotros vemos con preocupación el llamado de la rectora”.
Finalmente, con la mesa de diálogo caída, los estudiantes le piden al gobierno que reconsidere su posición.
Santiago Vélez expresó que mientras tanto, continuarán en las movilizaciones, “vamos a seguir llegándole a la ciudadanía desde las calles, en las redes sociales, y esperamos que el gobierno entre en razón. Se le está exigiendo al presidente Iván Duque directamente que retome la negociación con los estudiantes; pero, sobre todo, una posición en la que se permita llegar a un acuerdo”.
Movilizaciones en medio de disturbios
Las movilizaciones en defensa de la financiación de la educación superior pública de esta semana que pasó estuvieron marcadas por disturbios y bloqueos.
En Medellín, el pasado lunes y martes un grupo de estudiantes del Politécnico Jaime Isaza Cadavid salió a las calles a protestar y bloquearon la avenida Las Vegas.
Para el miércoles se vivió lo mismo pero esta vez en La Regional en medio de una manifestación de los estudiantes de la Universidad nacional.
Situación igual se vivió en la capital, Bogotá, la noche de este jueves cuando al momento de finalizar el recorrido se presentaron disturbios y debido a esta situación, algunas estaciones de Transmilenio estuvieron cerradas por varias horas.
Se suspendió mesa de negociación
Después de doce horas de reunión, el movimiento estudiantil se levantó de la mesa de discusión con el Ministerio de Educación, la noche del pasado martes, por considerar que no hay “voluntad” de parte del Gobierno para avanzar en la agenda.
A lo que el presidente Iván Duque le salió al paso a la posición de los estudiantes, argumentando que sí había voluntad.
Al respecto, los estudiantes en un comunicado alertaron que el viceministro de Educación, Luis Fernando Pérez, a cargo de la negociación “aseveró que el Gobierno de Iván Duque no está dispuesto a adicionar presupuesto para el año 2018, 2019, 2020 ni 2021, y tampoco ir más allá del acuerdo logrado con las rectorías”.