El Gobierno acusa a la principal alianza opositora, la Comisión Suprema para las Negociaciones (CSN), de ser agente de Arabia Saudí, reino que ha sido enemigo de Siria durante décadas.
El representante del régimen sirio en las negociaciones de paz auspiciadas por la ONU, Bachar Jafari, pidió este viernes al enviado especial para el proceso, Staffan de Mistura, que se implique más en la lucha contra el terrorismo y que presione al Consejo de Seguridad para que haga lo mismo.
En declaraciones a la prensa tras concluir el último encuentro con De Mistura de esta séptima ronda de diálogo político, la cual terminará esta noche tras cinco días de encuentros, Jafari dijo que, si bien uno de los dos temas en los que se ha centrado el proceso ha sido el "contraterrorismo", el Gobierno esperaba más.
"He urgido al enviado especial a que se comprometa de forma más profunda en nuestra preocupación respecto al contraterrorismo y que pida lo mismo al Consejo de Seguridad y la comunidad internacional", afirmó el representante del Ejecutivo de Bachar al Asad.
A pesar de esta solicitud, Jafari aseguró que las reuniones con el mediador habían sido "útiles".
Explicó que, en segundo lugar, hubo discusiones técnicas en torno a "aspectos constitucionales".
El también embajador sirio ante la ONU en Nueva York criticó a la coalición internacional contra el Estado Islámico (EI) liderada por Estados Unidos por "llevar a cabo un baño de sangre" en la ofensiva contra Al Raqa, controlada por dicho grupo yihadista.
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Asimismo, se refirió a lo que denominó "la agenda expansionista de Turquía" en el norte de Siria.
"Todo el mundo sabe que Turquía está intentando infiltrarse allí", sostuvo.
Preguntado sobre la posibilidad de poder mantener negociaciones directas con los grupos de la oposición, como aspira De Mistura desde hace meses, respondió que ya había dado "suficientes explicaciones al respecto".
"Nosotros hablaremos con unos socios nacionales, no con gente que tiene una agenda extranjera", concluyó.
De Mistura ha dicho esta semana en diversas ocasiones que le gustaría que en la próxima ronda de negociaciones, que pretende convocar para finales de agosto o principios de septiembre, las partes puedan reunirse de forma directa y no como hasta ahora, en una situación en la que él se encuentra por separado con ellos y después transmite a cada uno la opinión del otro.