Pese a los estragos que causó el ciclón la vieja coalición resistió el impacto. El diputado liberal de Envigado, Braulio Espinosa, declinó la presidencia de la Duma Departamental para el 2019.
La coalición original de la Asamblea de Antioquia, que se conformó desde el 2016 en apoyo al gobernador de Antioquia, Luis Pérez, resistió los fuertes embates y vientos del huracán “uribista” y se mantuvo en pie, aunque con algunos retoques en su composición.
Coincidiendo con la temporada de ciclones en el Caribe, en esta corporación comenzaron también a soplar fuertes vientos que presagiaban tormentas políticas en el manejo de la Asamblea Departamental para el próximo año.
Diputados “sobrevivientes” del paso de la borrasca informaron que sus colegas uribistas intentaron sacudir y desbaratar la alianza existente, pero este bloque aguantó las fuertes ráfagas y luego de la calma ya realizaron una reunión en la que ratificaron los acuerdos del 2016 y definieron mesa directiva para todo el último año de sesiones, en plena campaña electoral territorial.
Los siete diputados del Centro Democrático se la jugaron toda para armar una nueva coalición y para ello hicieron cuentas que tendrían como socios a dos diputados del Partido de la U que hoy son afines y conscientes de las nuevas realidades partidistas nacionales y que ese partido de filiación santistas está mayoritariamente contribuyendo al nuevo Gobierno Nacional del presidente Iván Duque.
Los diputados Norman Correa y Rodrigo Mendoza no han concurrido a las reuniones de la coalición original, por lo que sus antiguos socios de coalición suponen que definitivamente piensan dar el paso hacia una militancia en el Centro Democrático, donde los esperan con los brazos abiertos.
Si hubiese en estos momentos alguna norma que permitiera el transfuguismo ya estuvieran matriculados en las huestes del hoy partido de gobierno en lo nacional y que ganó las elecciones en la temporada electoral de este año.
Esos nueve diputados, cuentan las gargantas profundas en La Alpujarra, intentaron incorporar mediante intensos coqueteos a los cuatro colegas conservadores, por el hecho que este partido también está en matrimonio político nacional con los uribistas duquistas.
Si eso hubiese prosperado se habría formando un emocionante trece a trece en la siempre muy agitada Duma seccional, pero los vientos huracanados uribistas bajaron de categoría de cinco a uno y liberales, conservadores, cambioradicales, otros de la U y los verdes salieron vivitos de esas tormentas y se refugiaron juntitos.
Los conservadores no pararon bolas de las muy claras intenciones de los alumnos de Álvaro Uribe y se quedaron quietos en primera base y junto a sus antiguos socios.
Entonces, a pesar de los estragos y daños que dejó el huracán uribista por el recinto de la Asamblea, no pudo socavar la solidez de la coalición original que quedó de quince diputados supervivientes.
De ellos cinco son liberales, cuatro conservadores, dos de la U hoyista, dos cambioradicales y dos verdes.
La estrategia uribista no era conformar una coalición en contra del gobierno departamental para el último año, entre otras cosas porque tienen fichas claves en la administración regional. No obstante llamó la atención la negativa de los siete diputados del CD a aprobar la ordenanza sobre la escuela contra la drogadicción.
Una vez que el huracán uribista se esfumó, esa quincena de diputados llevó a cabo una reunión para hacer un balance de lo que quedó en pie o se salvó.
Cada bancada retejuró fidelidad a la coalición, por lo cual se pasó a analizar la situación de la mesa directiva para todo el 2019.
No hubo ningún problema entre los quince, pues todos dieron su voto de respaldo al diputado del Liberalismo de Envigado, Braulio Espinosa Márquez, para ocupar la presidencia, respaldo que es interpretado como una garantía de unidad de este bloque para lo que resta del actual periodo.
La elección de la mesa directiva del 2019, se llevará a cabo en las sesiones ordinarias de octubre y noviembre.
Pero Espinosa Márquez tenía una carta muy bien guardada. Sorprendió a sus otros catorce socios con el anuncio que declinaba a ser candidato a la presidencia de la Asamblea de Antioquia, algo muy poco usual, pues nadie recuerda algo similar en años anteriores. Mejor dicho nadie ha renunciado a ese honor político parroquial.
Este diputado explicó a sus socios que el motivo de su dimisión se debe a que se inscribirá en su ciudad natal como precandidato a la Alcaldía de Envigado.
Pero esta novedad fue rápidamente asimilada por la coalición, pues fue el mismo Braulio Espinosa el que planteó la solución al recomendar para la presidencia al también diputado liberal y considerado la conciencia jurídica de la Duma, el profesor y político girardoteño Hernán Darío Torres Álzate del equipo que lidera el rector de la U. de M., Néstor Hincapié Vargas, matiz que ha sonado mucho por estos días por un divorcio interno entre dos de sus fichas claves.
Este bloque no solo ratificó el derecho del Partido Liberal a presidir la corporación en el último año de sesiones, sino que en forma unánime también aceptó la propuesta que Hernán Torres sea el presidente de la corporación en el 2019.
Este abogado, docente universitario, capacitador y escritor de libros académicos, no ha ocupado ningún cargo directivo en la Duma, por lo cual es muy merecida su aspiración a ser dignatario.
La vicepresidencia primera
será para el Cambio Radical de Copacabana, Jorge Iván Montoya y la segunda vicepresidencia para Saúl Úsuga del Partido Verde.
La coalición mayoritaria que afrontará el último año de sesiones de la Asamblea de Antioquia está conformada por los siguientes quince diputado:
Liberales
Rigoberto Arroyave
Luis Carlos Ochoa
Braulio Espinosa
Rubén Darío Callejas
Hernán Torres
Conservadores
Jaime Cano
Juan Esteban Villegas
Carlos Ríos
David Alfredo Jaramillo
Luis Carlos Hernández
Santiago Manuel Martínez
Jorge Iván Montoya
Alex Osorio
Saúl Úsuga
Rogelio Zapata