Según el gobierno de Maduro, los países de la OEA están detrás de la violencia por las elecciones presidenciales.
El Gobierno de Venezuela acusó a algunos países de la Organización de Estados Americanos (OEA) de buscar una "ola de violencia que deslegitime" los próximos comicios presidenciales con la convocatoria para este lunes de un Consejo Permanente extraordinario centrado en el país caribeño.
La Misión Permanente de Venezuela ante la OEA mostró así en una carta dirigida a la Presidencia del Consejo Permanente su "energética protesta" ante una convocatoria "cuyo principal
objetivo", aseguró, "es la desestabilización del país los días previos a las elecciones presidenciales" del 20 de mayo.
La reunión en la OEA, que Venezuela consideró "una grave agresión injerencista", se celebrará a petición de Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Costa Rica, Estados Unidos, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Paraguay y Perú bajo la Presidencia del Consejo Permanente de Colombia.
Para Venezuela, esta reunión "repite la cínica estrategia aplicada el año pasado en los peores momentos de la violencia estimulada para frenar las elecciones de la Asamblea Nacional
Constituyente".
Asimismo, Venezuela acusó a los países que convocaron el consejo extraordinario del lunes de "ceguera selectiva", al no querer abordar en la OEA "los graves problemas del hemisferio".
"Feminicidios, ejecuciones extrajudiciales, desaparecidos y uso de fosas comunes en operaciones de seguridad pública, estudiantes asesinados, discriminación racial, campañas de odio contra los inmigrantes, la humillación constante del país más poderoso contra sus vecinos", citó Venezuela, como algunos de esos problemas.
Caracas, además, exigió a Colombia, como presidenta del Consejo, que "suministre los nombres" de los "supuestos expertos" invitados para exponer su punto de vista sobre la crisis venezolana en la reunión.
Oficialmente, la reunión del lunes está convocada para tratar "la situación humanitaria" en Venezuela y "su impacto en los países de la región". Con ese fin, los países convocantes pidieron la presencia de "autoridades expertas en la materia" para exponer "un panorama amplio y objetivo de la situación actual" en la nación petrolera.